El flamenco acerca Cádiz a Cartagena

 Cádiz, cuna del flamenco ¿es así o no es así?  Había que verlo y este año la Peña flamenca de Cartagena visitó Cádiz. De CartagenaCádiz, la tierra del flamenco recorrida de extremo a extremo.  Esta es la motivación de la peña cartagenera: convivir con la gente de otros sitios, visitarles e invitarles a visitarles de modo que podamos todos conocernos del modo mas auténtico. Córdoba austera y ortodoxa, Sevilla crisol y fusión de flamencuras, y este año… Cádiz, cuna del flamenco y de su solera y de sus cositas.

con_antonio_barberan_derecha

Largo viaje el de la expedición cartagenera hasta Cádiz, todos juntos en autocar y según nos cuentan resultó ser una gran idea.  Si bien el viaje es largo, la peña tiene una escuela magnífica que amenizó con sus palmas y cante el viaje. Así fue. En lenguaje marinero, la popa del autocar fue convertida en mesa de cabales para que cada cual se expresara a su gusto,  con sus tangos, bulerías, y otros cantes que fueron animando el camino durante toda la mañana.

La primera estación fue Algeciras. La ciudad andaluza recibió a la expedición con una lluvia poco frecuente en ambas tierras, pero la Peña Flamenca Sociedad del Cante de Algeciras los acogió  en un ambiente cálido y de amistad.  Presentación y bienvenida por su presidente José Carlos Cabrera. Y a esas horas de la tarde nada mejor que una excelente comida de hermandad en el Casino de Algeciras.

jose_carlos_cabrera_ayto_algeciras

Tras la comida, visita al Ayuntamiento de Algeciras, con su salón de plenos, sitio de memoria  de multitud de acontecimientos históricos y lugar donde su ciudad natal dio la  despedida a Paco de Lucía. El mal tiempo no  permitió degustar las calles y edificios pero la visita al Ayuntamiento dejó un profundo sabor, que será difícil de olvidar.

Cádiz recibió a los cartageneros con aquello de noamohamohá. Lloviendo tela. Pero el gustito de cruzar la Puerta de Tierra y entrar en la Tacita de Plata puso el cuerpo en disposición de perdonar las incomodidades que pudiera producir el mal tiempo.  Tiempo libre para los viajeros. Este cronista aprovechó para hacer un recorrido por las callejuelas próximas a  Plaza de España y dirigir sus pasos hacia Plaza de Mina para ir a recalar en  la calle de Zorrilla, donde se toma buen pescaíto y buena manzanilla. Con el cuerpo repuesto y ánimo para hacer frente a la lluvia  nos encaminamos hacia  el paseo de la Alameda en demanda de las Murallas de San Carlos, bajo las cuales, y mostrando sus techos abovedados propios de una construcción fortificada, se encuentra la sede de la Peña Enrique el Mellizo.

socios_peña_en_sanlucar

La Peña Enrique el Mellizo tiene un local de gran sabor antiguo. Presidida por un busto del cantaor y tapizadas sus paredes con fotografías de memorables maestros del flamenco y  acontecimientos que allí tuvieron lugar. Recuerdos de El Mellizo, Aurelio, Pericón y muchos otros. Bien atendidos desde una atenta cantina, disfrutamos de un magnifico recital de cante.  El joven cantaor Samuel Serrano, de Chiclana, con su excelente metal de voz y su cante de gran fuerza, acompañado a la guitarra por Juan del Morao nos mostró como se canta en Cádiz, por tientos, soleá, seguiriyas, alegrías como no, y remate por fandangos.  Gustó, ya lo creo que gustó. Un gustoso colofón para una larga jornada flamenca de viernes.

El sábado tuvo San Pedro un rasgo de benevolencia con los viajeros y dispuso una mañana agradable, sin lluvia y con algo de sol. A  las once en punto de la mañana pasaba a recogernos en el hotel Antonio Barberán, presidente de la Cátedra de Flamencología de Cádiz, para guiarnos en un paseo por el Cádiz flamenco. La mañana pasó en un suspiro, entre las preciosas calles del Cádiz antiguo y las exactas explicaciones de Antonio BarberánPlaza de San Juan de Dios, Barrio de Santa María, iglesia de Santa Cruz, la Catedral, barrio de la Viña, la muralla, y todos esos sitios cuyos nombres conocemos por las coplas. Los  gaditanos tienen muy cuidada su historia y su arte, de modo que aquí y allá se encontraban placas sobre las fachadas de antiguas casas indicando que allí vivió, o había nacido, Enrique el Mellizo, Aurelio Selles, Chano Lobato, la Perla de Cádiz o tantos y tantos artistas que ha dado la ciudad. El paseo guiado concluyó en la calle Virgen de la Palma, donde pudimos reponer fuerzas en algunas de las muy típicas tabernas de este precioso enclave del barrio de la Viña. Ya por la tarde, visita a la Caleta y retorno al hotel continuando el paseo por el Cádiz histórico.

venta_vargas_canta_antonio_gonzalez

San Pedro,  que había sido clemente todo el día, volvió a enviarnos la lluvia por la noche. Claro que no nos importó demasiado. Nuestro autocar nos recogió a las puertas del hotel para llevarnos a un lugar emblemático del flamenco en Cádiz: la Venta de Vargas, en San Fernando, donde se inició Camarón y por donde han pasado tantos artistas que dicen que el duende del flamenco se quedó a vivir allí.

Nos acompañó a la cena Enrique Montiel, escritor, flamencólogo, biógrafo de Camarón, que con gran conocimiento y agradable discurso pleno de anécdotas nos relató a los postres la historia de la Venta y la familia que la regentaba. Luego, recorrido por los históricos locales de la Venta y, habiendo fallado el recital que teníamos concertado, hubimos de llamar al duende, que no debía estar muy lejos, para que los alumnos de la escuela de la Peña se arrancaran con sus palmas y cantes que llenaron de flamenco la sobremesa en tan señalado lugar.

El domingo amaneció con una mañana lluviosa, lo cual no fue obstáculo para que los planes continuasen: llegar hasta Sanlúcar de Barrameda, en el extremo occidental de la provincia de Cádiz, junto a la desembocadura del río Guadalquivir, y a la vista del Coto de Doñana. Y así hicimos, y echándole valor y paraguas, caminamos hasta Bajo de Guía para disfrutar de la vista del río fundiéndose en el océano Atlántico. Otros miembros de la peña prefirieron disfrutar de las excelentes tabernas del centro de Sanlúcar, y la manzanilla que allí, como en ningún otro sitio sirven. Luego del almuerzo, regreso a Cartagena, con el buen sabor de un viaje completo y redondo, pleno de sensaciones flamencas.

Redacción: Fulgencio García.

, , ,
error: © Todas las imágenes y contenidos de la web son propiedad de alaireyacompas.es