Todos somos malacateros
La Catedral del Cante de La Unión abrió el pasado viernes sus puertas para acoger la gala inaugural de la Asociación Cultural El Malacate Flamenco que nació hace pocas fechas en la ciudad minera y flamenca de la mano de un grupo de hombres y mujeres amantes de la cultura y el flamenco, encabezados por Paco Paredes quien fue el encargado de presentar su primera gran noche. La difusión de la cultura en cualquiera de sus ámbitos está entre los objetivos fundacionales de este proyecto que pretende ser una ventana de la idiosincrasia de la comarca de Cartagena y La Unión al resto de España y el mundo.
A estos primeros pasos de El Malacate Flamenco se unió el arte y el conocimiento de tres jóvenes flamencos que darán que hablar en los años venideros. La bailaora murciana Cynthia Cano, el Bordón Minero en el Festival Internacional del Cante de las Minas, Juan Habichuela nieto y José Enrique Morente heredero de la estirpe de los Morente fueron los encargados de ofrecer las primeras emociones a los malacateros en la noche del 30 de noviembre de 2015.
Abrió la velada la sonanta del guitarrista Faustino Fernández quien junto al cante de Sebastián Contreras Bastian acompañaron a la primera de las protagonistas de la velada; Cynthia Cano. Por soleá arrancó la de Las Torres de Cotillas, soleá rematada por bulerías en su baile enérgico y sentido. A continuación bulerías entre Bastian y Faustino para dar paso de nuevo a Cynthia por alegrías en las que demostró todo el baile que lleva dentro y en las que movió su mantón de forma magistral, dejando un gran sabor de boca entre los asistentes a la gala.
Sublime estuvo Juanillo Habichuela (Juan Habichuela nieto) durante su actuación tras el baile de Cynthia Cano. Nos llevó por taranta y tanguillos, pero llevarnos, pudo llevarnos por cualquier verea, hubiésemos muerto con él en esta noche mágica. Temblaron los pilares de la Catedral del Cante al son de la magia en el toque de Juan que se llevó una de las ovaciones más importantes de la gala. Metal del bueno entre sus dedos.
Y de un metal precioso a otro. De los Habichuela a los Morente. Granada en esencia. La ciudad nazarí resonó fuerte en La Unión de la mano de dos de sus más jóvenes baluartes. Siguió al toque de Juan Habichuela nieto el toque y el cante de José Enrique Morente. Recordamos al maestro granadino, Enrique Morente, a través de su hijo quién se vació en las tablas del antiguo Mercado Público unionense. Bonita su voz que rompía o rasgaba a su antojo. Nos paseó por caña y tarantas en las que recordó los otrora pueblos mineros del levante, nuestro pasado.
Pausó la noche por tientos tangos con constantes giros y recuerdos a su padre, en letras que Enrique Morente elevó a los altares flamencos. Y susurró junto a su compadre Juan Habichuela el Romance de Curro el Palmo de otro genio de nuestra música, Joan Manuel Serrat. Grande José Enrique ofreciendo en La Unión los primeros aromas de su arte y grande el futuro que le espera.
Cerca del final de la gala llegó una de las sorpresas de la noche. Cynthia Cano ofreció al público malacatero una de las piezas de su último espectáculo De Alfa a Omega que presentó el pasado jueves en el Teatro Romea de Murcia. La voz de Enrique Morente volvió a sonar en la Catedal del Cante con su Ciudad sin sueño que se fundió con el baile histriónico de Cynthia Cano, a su compás.
Por fiesta, con todos los componentes de El Malacate, los artistas además de Lucía Leyva y Tania Salazar sobre el escenario, se cerró la primera gala de la Asociación Cultural El Malacate Flamenco. Esa bulería final prometió convertirse en la primera de muchos fines de fiesta en este proyecto que ayer dio con fuerza el primero de sus pasos. ¡Suerte amigos! ¡Todos somos malacateros!