Flamenco e historia por Juan Pinilla en Almería
El cantaor flamenco, investigador y escritor Juan Pinilla pasó por Almería hace unos días para presentar la charla titulada: Flamenco, el cante de un pueblo dentro del ciclo de conferencias que sobre historia y cultura andaluza se vienen desarrollando en el Centro Andaluz del Pueblo Javier Verdejo, así como presentarse sobre las tablas de la Casa de la Música de Carboneras con un recital flamenco de corte clásico.
La charla empezó por un recorrido histórico sobre los inicios del flamenco así como por sus antecedentes culturares. Pinilla repasa a un gran número de intelectuales que han hablado y se han interesado por el flamenco, deteniéndose especialmente en Blas Infante, al que el propio Pinilla califica como “uno de los grandes intelectuales que ha dado la humanidad” y que en su obra Orígenes de lo Flamenco y secreto del cante jondo hace un extraordinario análisis histórico de este fenómeno folclórico andaluz que se ha visto corroborado por investigaciones recientes. Pinilla, recogiendo las teorías de Blas Infante incide en la esencia exclusiva y estrictamente andaluza del flamenco, siendo el pueblo trabajador andaluz su creador y su depositario, su interprete y su destinatario, hasta que traspasó las fronteras andaluzas para convertirse en una de las manifestaciones culturales populares con más reconocimiento de todo el planeta.
Volviendo a los orígenes de esta expresión artística andaluza, Blas Infante sitúa en la música andalusí su antecedente más reconocible, pasando de una música de carácter coral a un formato individual y restringido a unos determinados espacios sociales por la represión y la necesidad de ocultación de la cultura andaluza, prohibida por numerosas pragmáticas (leyes) desde la Toma de Granada hasta que vuelve a fluir por los pueblos andaluces ya convertida en flamenco tal y como lo conocemos hoy en día. Pero de la música andalusí al flamenco hay algunos pasos intermedios que Juan Pinilla los sitúa en los trovos alpujarreños, granainos y almerienses y que desde estas sierras, focos de resistencia militar, cultural e identitaria ante la conquista cristiana, se fueron extendiendo por todos los pueblos andaluces tras las deportaciones de los rebeldes del Reino de Granada por toda Andalucía.
Otro de los aspectos del Flamenco que Juan Pinilla no quiso dejar de lado, fue el componente social del mismo, convertido en herramienta de la protesta social en Andalucía durante muchos periodos históricos y especialmente en la llamada “transición” española, donde las letras y el compromiso con la clase trabajadora llevaron a muchos cantaores a las cárceles del franquismo.
Tras esta introducción histórica, Juan Pinilla, acompañado por la excepcional guitarra del almeriense David Caro, nos explicó los fundamentos del flamenco y sus palos, con demostración incluida de una gran variedad de ellos, haciendo parada obligada en los cantes de Almería, variados y ricos como las Tarantas y los cantes de las minas, originarios de Almería y extendidos posteriormente por las zonas mineras de La Unión o de Linares.
En el debate posterior con el público asistente, Juan Pinilla lamentó el trato que las instituciones andaluzas dan al flamenco, más interesadas en fidelizar a los artistas y en premiar a sus adeptos, que a fomentar y difundir el flamenco. La prueba de esta afirmación está en la dificultad para implementar el flamenco en los planes de estudio, a pesar de que estos recogen esa posibilidad, quedando en una simple anécdota ante el desinterés de la administración por dotarlos de contenido y de reglamento para que fuera una realidad.
La charla en el Javier Verdejo solo fue un aperitivo de lo que Juan Pinilla, acompañado a la guitarra por David Caro y el baile de la joven promesa almeriense Inés de Inés, nos ofrecieron en la Casa de la Música de Carboneras. Todo ello en una sala abarrotada por un público entregado y un espectáculo de altísima calidad en el que se disfrutó de una gran variedad de cantes, anécdotas, además de la guitarra de un joven almeriense que está llamado a ser uno de los grandes en un futuro cercano; del baile de otra joven promesa almeriense como es Inés de Inés, ya casi convertida en una realidad; y todo ello, con un gran artista y una gran persona como es Juan Pinilla.
En el recital que dio comienzo a las 22:00 horas Juan Pinilla interpretó numerosos palos del arte flamenco durante más de hora y media, comenzando con los cantes del concurso de 1922, en los que el artista iba intercalando de manera recitada junto a los acordes de la guitarra de David Caro la historia de cada uno de los cantes que interpretaba, zambra, seguiriya, malagueña, peteneras…
Continuaba el recital con romances con letra de Juan José Téllez, cantes mineros y tarantas de Almería y Linares, seguidamente el toque de color lo ponía la artista invitada de la noche, Inés de Inés, que aparecía sobre el escenario para interpretar unas preciosas alegrías con mantón con las que levantó al público de sus asientos, demostrando que es uno de los valores emergentes del arte flamenco almeriense. En la recta final se desarrollaron granadina y media, abandolaos y fandangos naturales a pie de escenario con los que el artista además del aplauso arrancó más de una lágrima entre los asistentes.
Juan Pinilla no quiso despedir la noche sin dar las gracias a todos los presentes, colaboradores, amigos, medios y todas las personas que se han cruzado en su camino en estos días de promoción en la ciudad de Almería. Como broche de oro los artistas se despidieron por bulerías, sobre todo de la mano de la joven Inés de Inés, quien volvió a demostrar su dominio escénico y su manera de engrandecerse cada vez que pisa un escenario. Por fiesta, acompañada con unas pinceladas de baile por el propio Juan Pinilla se cerraba una noche de arte que quedará en el recuerdo de todos los presentes.
Texto: Diego Martínez
Fotografía: Jesús Amat